TIJUANA.- Cinco millones de litros de gasolina y diesel que dejaron una derrama económica ilegal por 5 mil 800 millones de pesos, fueron sustraídos de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex) ante la incursión del crimen organizado en ese ilícito, informó el gerente de Políticas y Desarrollo Comercial de la paraestatal, Jesús Berumen García.
Consideró justificada la intervención de Ejército en la vigilancia de la infraestructura petrolera ante la incursión de esas bandas delictivas, además de que se realicen investigaciones internas para detectar posibles cómplices en la misma dependencia.
Mientras Pemex no cuente con sistemas computarizados para monitorear los ductos y detectar cualquier anomalía, no habrá capacidad de vigilancia y supervisión personalizada, afirmó.
De visita en Tijuana donde se reunió con propietarios de estaciones de gasolina, Berumen García explicó que Pemex no cuenta con personal armado para enfrentar la incursión de bandas criminales en el robo de combustible, por lo que consideró justificada la intervención de militares en estas tareas.
“Creo que es una buena medida la militarización”, especificó al aclarar que el personal de la paraestatal no ha sido amenazado, salvo cuando se dan casos de asaltos a pipas de combustible.
Por otra parte, los delincuentes han optado por la perforación de las tuberías, lo que se da principalmente en zonas despobladas de los 14 mil kilómetros con que cuenta Petróleos Mexicanos en el país.
Pero, tan despobladas están esas áreas que cuando se detecta algún robo y hay una intervención policíaca, es común que al poco tiempo los delincuentes regresen a seguir “ordeñando” cuando la vigilancia se retira.
Abasto garantizado.
Sobre el precio y abasto de combustibles en la frontera norte, el funcionario aseguró que ambos rubros están garantizados y descartó que vaya a repetirse la fuga de consumidores que se registró en el 2008.
Dijo que salvo situaciones extraordinarias como la que ocurrió el año pasado cuando un barco cisterna se descompuso antes de llegar al puerto de Ensenada generando desabasto, el compromiso de atender la demanda está cubierto.
Confirmó que el precio del diesel seguirá incrementándose si el mercado lo marca, aunque no superará el costo del que se vende en Estados Unidos ante el esquema de homologación.
Por otra parte, la Magna seguirá a 7.72 y la Premium a 9.57, independientemente de las tarifas que se aplican en el otro lado de la frontera, que actualmente se vende hasta tres pesos por arriba de la oferta en Baja California.
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